1. Introducción
En México, los Organismos de Evaluación de la
Conformidad (OEC) que funcionan como
laboratorios de calibración y unidades de
inspección, se dedican a garantizar la calidad del
mercado nacional, eficientizar los procesos y
asegurar el cumplimiento regulatorio [1] Desde
julio de 2020, estos organismos son regulados
por la Ley de Infraestructura de la Calidad (LIC),
que sustituyó a la ley anterior, además deben
estar acreditados por una Entidad Acreditadora o
la Autoridad Normalizadora y, cuando se trate de
Normas Oficiales Mexicanas, Estándares,
Normas Internacionales o disposiciones legales
relacionadas, deben ser aprobados por la
Autoridad Normalizadora [2], [3].
Sin embargo, los continuos cambios en la
normatividad aplicada al sector de hidrocarburos
en su cadena de valor (Upstream, Midstream y
Downstream) regulada por la ASEA, la CRE y la
CNH [4], exigen que los laboratorios de
calibración y unidades de inspección que ofrecen
servicios al sector se adapten continuamente para
cumplir con las necesidades del mercado
cumpliendo con los requisitos que están
establecidos en las convocatorias del Diario
Oficial de la Federación, Catálogo Nacional [5],
[6] y los lineamientos establecidos por las
Entidades de Acreditación [7], [8], ASEA [9],
CRE y CNH dentro de los cuales se destaca la
conformación e implementación de sistemas de
gestión con base a los estándares ISO/IEC 17020
[10], ISO/IEC 17025 [11] e ISO 9001 [12].
Por lo tanto, para lograr la conformación de un
Sistema de Gestión, asegurando su eficacia,
depende de diversas variables que una
organización debe considerar para su
implementación. Sin embargo, la integración de
diferentes estándares en un sistema de gestión
puede resultar compleja y desafiante para las
organizaciones, ya que se tiende a cumplir con
los requisitos de manera individual, lo que
desvirtúa la orientación del sistema al no
establecer vínculos entre ellos y ocasiona la
duplicidad de procesos conlleva a problemas de
espacio, seguridad y costos, así como a la pérdida
de tiempo en la ejecución de actividades, debido
a la necesidad de personal duplicado y auditorías
individuales prolongadas. Actualmente, la
tendencia de los sistemas de gestión es
integrarlos en un solo sistema [13], lo que ayuda
a reducir costos y evitar duplicaciones en
comparación con las organizaciones que utilizan
múltiples sistemas [14], [15].
Por ende, el presente artículo tiene como objetivo
mostrar la metodología para integrar los sistemas
de gestión según las normas de interés, lo cual
ofrece numerosas ventajas a los organismos.
Entre ellas se encuentran: asegurar la realización
efectiva de las actividades diarias, proporcionar
información desde una única fuente, reducir la
duplicidad de procesos y procedimientos,
disminuir el tiempo empleado en la revisión de
estos, y ahorrar dinero al eliminar esfuerzos
duplicados [16], [17].
En conclusión, el artículo se compone de cuatro
secciones:
Sección 1. Antecedentes; se aborda el desarrollo
y evolución del tema a lo largo del tiempo.
Sección 2. Metodología; se presenta la estructura
del proceso de integración: Paso 1. Análisis del
contexto, Paso 2. Identificación de requisitos
similares y divergentes, Paso 3. Identificación de
las partes interesadas y Paso 4. Desarrollo de un
marco de integración. Sección 3. Resultados y
discusiones; se presentan los resultados y
discusiones con respecto a la metodología
descrita: PASO 1. Análisis FODA, PASO 2.
Cuadro comparativo de ISO 9001:2015, ISO
17020:2012 e ISO 17025:2017, PASO 3. Matriz